martes, 9 de abril de 2019

Israel elige nuevo parlamento

Israel celebra hoy elecciones generales para la 21 Kneset o Parlamento. Están llamados a las urnas 6,3 millones de ciudadanos, que votan en 10.270 mesas electorales repartidas por todo el país. Los colegios electorales permanecen abiertos entre las 7 y las 22 horas, mientras que en las comunidades pequeñas abrieron a las 8 de la mañana y cerrarán a las diez de la noche hora local (20:00 GMT), según informa el periódico israelí en castellano AURORA.
La Kneset o Parlamento de Israel consta de 120 diputados que son elegidos en sufragio universal para una cadencia de cuatro años. El candidato a primer ministro deberá contar con la mayoría absoluta de la cámara para ser investido, en este caso, dada la fragmentación del arco político israelí, serán necesarios acuerdos post-electorales entre las formaciones políticas en modo de coaliciones o alianzas.
Cuarenta partidos o listas electorales compiten para acceder al Parlamento.
En estas elecciones, por primera vez, se lleva a cabo un experimento en el cual los ciegos podrán votar con un dispositivo especial y sin acompañante. En las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), hoy es el tercer día de votación de los soldados. Alrededor de 5.000 soldados solitarios, que no tienen familia en el país y precisan asistencia 
económica, trabajarán en las urnas militares durante el día de las elecciones y recibirán a cambio una paga por ello, según especifica el rotativo israelí.
En estas elecciones el actual primer ministro Benjamín Netanyahu opta a la reelección, frente a una fuerte competencia con uno de sus principales rivales, el ex jefe de Estado Mayor, Beni Ganz.

domingo, 31 de marzo de 2019

El precepto de la Circuncisión o Brit Milá


12 (1) Y le dijo el Eterno a Moisés: (2) “Diles a los hijos de Israel. Si una mujer ha dado a luz un varón quedará impura siete días. Será impura como en el tiempo de su menstruación. (3) Y el día octavo será circuncidado el prepucio del niño. (4) Ella permanecerá durante treinta y tres días purificándose de su sangre. No tocará nada sagrado y no entrará en el santuario hasta que se cumplan los días de su purificación. (5) Pero si da a luz una niña, será impura durante dos semanas como en su menstruación, y sesenta y seis días permanecerá purificándose de su sangre. (6) Y al cumplirse los días de su purificación, ya sea por hijo o por hija, traerá al sacerdote un  cordero de un año por holocausto y un pichón de paloma o una tórtola por ofrenda expiatoria, a la entrada del Tabernáculo, ante el sacerdote…”.
Los conceptos de pureza o impureza que se citan en la Torá no deben entenderse como sinónimos de limpieza o suciedad, sino que se han de considerar como un estado de elevación o depresión espiritual que afectan al alma y no al cuerpo como resultado de distintas circunstancias o contextos.
La parashat Tazría (Vayikrá 12:1-8; 13:1-59) trata los aspectos relacionados con los estados de pureza e impureza, se presta especial atención al precepto del Brit Milá o de la circuncisión, que se cita en el versículo tercero: “…Y en el octavo día deberá hacerlo circuncidar…” Sobre este particular se describen cuatro motivos que explican las razones de por qué se prescriben los ocho días inmediatamente posteriores al nacimiento del varón. Desde el punto de vista facultativo o científico se ha descubierto que es exactamente en el octavo día cuando el bebé posee el más alto nivel de coagulación sanguínea. La madre, por regla general, se ha recuperado del parto en ese margen de tiempo y puede disfrutar de la ceremonia del Brit Milá.

viernes, 29 de marzo de 2019

Las leyes dietéticas del Pueblo Judío


Al día siguiente de haber descendido Moisés del Monte Sinaí con las sagradas Tablas de la Ley fue ordenada la construcción del Mishkán o Tabernáculo, después de que se sellara el perdón divino con su pueblo. El hombre había impurificado el mundo con la idolatría al erigir el becerro de oro. Cuando llegó el arrepentimiento, sobrevino de inmediato la orden de levantar el Templo para albergar a la Shejiná o Presencia Divina en la Tierra.
La parashat de esta semana (Shabat Mevarjim) Shemini (Vayikrá 9:11) viene a determinar las leyes dietéticas del Pueblo Judío, dictamina por regla general sobre qué tipo de animal (mamífero, ave o pez) cuya carne es o no apta para consumir,  el compendio básico de las leyes de Kashrut que se mantienen hasta hoy en día. Es una ley de la Torá que no tiene una explicación, pero que es obligada cumplir, porque entronca con el ideal de pureza y con el mandato de ser puros, como lo es el Eterno (Ha’Kadosh Baruj Hu).
Los animales cuya carne es permitida ingerir son aquellos que tengan pezuña partida y sean rumiantes. De los peces, todos aquellos que tengan escamas y aletas, es condición indispensable para su consumo, por lo que están prohibidos los productos del mar que no reúnan tales requisitos. Basta que no cumplan una condición para que sea taref o no apto. También se fijan las aves que son comestibles: gallina, pato, perdiz…, entre otras;  y las que no. De los animales que vuelan están prohibidos el águila, el cuervo, el avestruz, el buitre, el milano, el murciélago, la gaviota… Ni que decir tiene que son abominación los animales que se arrastran por la tierra o los reptiles.
Así pues no es apta para comer la carne del cerdo (todos sus derivados o componentes que pueden aparecer en productos elaborados, manufacturados, o manipulados por gentiles) y los animales de su especie, liebre, conejo y camello, entre otros.

Ideologías antagónicas

Todos los animales permitidos o aptos (kasher/kosher) deben tener la planta del 
pie dividida y ser rumiante. De la interpretación cabalística se infiere, conforme explica el rabí Mordejay Babor, que “estas dos características básicas que poseen los animales permitidos, apuntan-metafóricamente-a lo siguiente: la planta del pie es la que marca el paso a seguir… y rumiar es volver a masticar lo ya ingerido. Existen dos ideologías religiosas opuestas en el mundo gentil. Una-la del Islam-postula la idea radical y obtusa de conservar fanática e irracionalmente las reglas y costumbres de antaño rumiando constantemente lo ya ingerido. La otra-el Cristianismo-reforma frecuentemente sus reglamentos para adecuarlos a las circunstancias de la época y sus conveniencias. Esto último representa la planta del pie dividida porque su ideología se bifurca y se desvía”.
“La primera está simbolizada en el camello-añade-, que rumia constantemente y posee las plantas del pie cerradas. Y la segunda, se refleja en el cerdo, que muestra sus patas hendidas, señal de división y reforma”.
Explica que “lo kosher, es la idea del Judaísmo que propone ambas ideas en conjunto. Es decir, primero y principalmente, preservar firmemente las reglas y tradiciones legadas por nuestros antepasados. Y segundo-y la vez-mantener la mente abierta en una constante actualización-en cada circunstancia y modalidad que presente la sofisticada tecnología moderna-basada siempre en la interpretación raigal de la Torá Oral y con el único fin de conservar la práctica correcta de sus preceptos…”.
El cerdo es el prototipo del taref y, por cierto, el más detestable. Es exactamente igualmente prohibido que los demás. Su odiosa fama proviene, según subraya Babor, porque cuando come extiende sus patas hendidas hacia adelante como mostrando que posee una señal de kasher, mientras oculta su boca entre ellas ocultando el símbolo que lo impugna-no es rumiante-, o sea, es omnívoro. Esta actitud hipócrita lo hace tan repugnante ante el Judaísmo, cuyos principios se basan en la franqueza y la verdad.
En lo que se refiere a la fauna marina (“…todo lo que tiene aletas y escamas…”) no se especifican nombres ni clases, sino que todo se limita a estas dos señales. La razón de esto se remonta a la misma Creación cuando D-s presentó toda la fauna terrestre ante Adam, quien les va poniendo a cada uno su nombre. Sin embargo, no ocurrió lo mismo con la fauna marina, cuyas especies no fueron denominadas por Adam.
La Torá, en lo concerniente a las aves, sólo enumera las prohibidas. Más adelante en el Libro Devarim (11:14) el texto señala que “todo pájaro de especie pura podéis consumir…”.
En el texto bíblico no se especifican las características distintivas de las aves puras, como ocurre en el caso de los animales y los peces. Sin embargo, por tradición se sostiene que existen cuatro indicativos particulares para distinguir las especies permitidas. A saber, no son de rapiña; poseen espolón en sus patas; tienen un buche donde acumulan el alimento ingerido; poseen una membrana interior que se desprende con facilidad, cubre el estómago. No obstante, dada la complejidad para reconocer las mismas y la diversidad de aves que pueblan el planeta-además de la semejanza entre las especies avícolas-se optó por autorizar y catalogar como aptas para el consumo (kasher), únicamente a las especies conocidas a través de los años.
Con respecto a las langostas y sus especies, hay decenas de clases de langostas. La Torá fija como permitidas sólo cuatro especies. Estas últimas, actualmente, no son identificables. Debido a esto no se permite el consumo de ninguna clase.
Cabe destacar y coincidimos con la sabia opinión del rabí Mordejay Babor, que ninguna de las leyes de la Torá ha sido expresada con tanta meticulosidad, precisión y especificaciones como estas normas que marcan la dieta alimenticia del Kashrut.

Fuentes: Harav Mordejai Babour, Jumash HaMerkaz, Documentación propia.


viernes, 22 de marzo de 2019

Ascender a lo más alto


 Y le dijo el Eterno a Moisés: “Ordena a Aarón y a sus hijos, diciéndoles:-Esta es la ley del holocausto. Permanecerá encendido sobre el altar toda la noche hasta la mañana, con el fuego ardiendo. Y el sacerdote, vestido con túnica de lino y calzones de lino sobre su carne quitará las cenizas dejadas por la combustión de los holocaustos y las pondrá en el costado del altar“ …
En esta parashat (Vayikra 6-8) vemos y apreciamos cómo la Torá dicta normas precisas con respecto a la Olá que fue consumida por un progresivo y firme fuego durante toda la noche. “Un fuego arderá continuamente sobre el altar, no deberá ser extinguido” (Vayikrá 6:6). Cada mañana, el kohen (sacerdote) añadía nueva leña para que continuara con firmeza la llama del fuego.

lunes, 18 de marzo de 2019

El triunfo del bien sobre el mal


Los judíos de Israel y la Diáspora festejan Purim y Shushán Purim a mediados de esta semana. El término Purim significa literalmente “Suertes”, plural de léxico Pur (Suerte o sorteo). En estas fechas se conmemora la salvación de los judíos de Persia, según se narra en el Libro de Ester o Meguilat Ester (Rollo de Ester). Se trata de una fiesta menor en el calendario, y existe la obligación de escuchar o recitar el relato de Ester en la sinagoga. El momento más temprano para la lectura del Libro de Ester es el 11 de Adar, pero se acostumbra a efectuarla  en el rezo de arbit del miércoles, en este caso.
Hay que tener en cuenta que  Purim es una celebración festiva y carnavalera en la que se intercambian regalos y se permiten excesos en la comida y la bebida (sin emborracharse).
Miércoles 20 de mazo de 2019- 13 Adar Bet 5779 – Taanit Esther. Ayuno menor, que recuerda que en este día Esther decidió revelarse al rey su origen judío. Por lo que pidió apoyo espiritual a la comunidad.
Jueves, 21 de marzo de 2019-14 de Adar Bet 5779: Purim.
Viernes, 22 de marzo de 2019-15 Adar Bet 5779: Shushán Purim.

viernes, 15 de marzo de 2019

Recuerda

Este Shabat se inicia la lectura del tercer libro de la Torá, Vayikrá, cuyo primer capítulo se refiere a todo lo concerniente a las ofrendas, su observancia y procedimientos, así como otros aspectos relacionados con las prendas usadas por los kohanim en sus oficios en el Tabernáculo o Mishkán. El libro Vayokrá comprende diez porciones o parashiot: Vayikrá,  Tsav, Shemini, Tazría, Metsorá, Ajaré-Mot, Kedoshin, Emor, Behar y Bejukotay. 
El Shabat que precede a Purim, que es el que nos ocupa en este modesto comentario, se denomina Shabat Zajor, pues en el mismo se da lectura en la Torá a la parashat Vayikrá.
Según la opinión de la mayoría de las autoridades rabínicas, la lectura de esta parashá es un precepto de la Torá, por lo tanto es necesario que el oyente se concentre en cumplir con el mandato de la Torá de recordar ataque de Amalek cuando salimos de Egipto. Por supuesto, también el oficiante debe concentrarse en que su lectura sirva para todos aquellos que la están oyendo.
La persona que por algún percance no pudo concurrir a la sinagoga este Shabat y por lo tanto no oyó la lectura de la parashat Zajor, debe concentrarse en cumplir con el mandato de la Torá de recordar el ataque de Amalek cuando oiga esta porción en la parashá de Ki Teze, en el libro de Debarím. En este caso, debe pedirle al hazán que da lectura a la Torá que se concentre en hacerlo cumplir con esta obligación. Escribe Rabí Ovadia Yosef, z”l, que aún así será apropiado que lea esta porción en un pentateuco común.

viernes, 8 de marzo de 2019

La conclusión e inauguración del Mishkan


(21) Éste es el recuento de lo gastado para el Tabernáculo, el Tabernáculo del Testimonio, según la cuenta efectuada por orden de Moisés y bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón. (22) Bezaleel, hijo de Uri, hijo de Jur, de la Tribu de Judá, había hecho todo lo que el Eterno le había ordenado a Moisés, (23) con la ayuda de Aholiab, hijo de Ahisamac, de la Tribu de Dan, hábil escultor y dibujante de tejidos de lino fino torzal, experto en teñido celeste, púrpura y carmesí…
Con esta parashat Pekudé (Shemot 17:17-18-13) finaliza el ciclo de la lectura del Segundo Libro del Éxodo o Shemot y en ella se nos explica   todo sobre la inauguración del Tabernáculo, como adelantamos en una entrega anterior.
Siguiendo con nuestro breve y modesto comentario de la parashat, nos hacemos eco del estudio que de la misma hace el rabí Mordejay Babor, quien señala, entre otras cosas, que “de manera oculta están marcadas aquí las cifras de los años que durarán en pie los dos santuarios mayores-los beth hamikdash-erigidos muchos años más tarde. El primero duró 410 años, exactamente lo que suma la palabra Mishkán y el segundo estuvo- hasta ser destruido-420 años, equivalentes a la suma de las palabras el Mishkan, más sus cinco letras. Es para señalar esta velada revelación que el versículo repite dos veces la expresión Mishkán, aludiendo a los dos templos que existirían”.