Rav Yerahmiel Barylka. |
Reflexiones del Rav Yerahmiel
Cuando visitamos sinagogas majestuosas en muchos países, no dejamos de plantearnos cuál es el lugar del arte sacro en los templos de oración, como no podemos evitar buscar diferencias entre lo que aparece en nuestro libro y lo que luego describiría el Primer Templo.
Cuando esta semana llegamos nuevamente a la culminación
de Shemot, seguimos leyendo detalles de la ornamentación
del tabernáculo. Los capítulos paralelos que aparecen
en nuestra parashá y en Divrei Haiamim referidas al
mishcán y al Bet Hamikdash de Shlomó, tienen similitudes.
Sin embargo, hay diferencias.
Moshé recibió instrucciones directas y específicas de .A. para la construcción del Mishcán, y
la Torá destaca que todo debía hacerse precisamente como .A. le mostró (Shemot 25: 9).