Yom Haatzmaut, literalmente, Día de la Independencia de Israel, es observado desde 1949 como uno de las festividades menores del calendario hebreo. Yom o Jag Haatmaut conmemora la restauración de la soberanía judía en Eretz Israel y la Declaración de Independencia, el 5 de Iyar de 5708 (14 de mayo de 1948), con la proclamación del Estado de Israel. Si el 5 de Iyar coincide con un viernes o Shabat, se adelanata al jueves para evitar la profanación del Shabat. En estos días festejamos el 67 aniversario de la restauración de la soberanía del Pueblo Judío en la Tierra de Israel.
Torre de David, Jerusalem./RAFAEL BEN-ABRAHAM BARRETO |
En esta ocasión se levantan las restricciones del Omer tras
la celebración de Yom Hazikarón (Día del Recuerdo) cuando una ceremonia del
prendido de antorchas y salva de cañones en el Monte Herzl en Jerusalem
determina el comienzo de la festividad nacional. En este contexto se realizan
los servicios festivos de Yom Haatmaut en la sinanoga y en esa noche las
principales ciudades de Israel organizan demostraciones y exhibiciones de
fuegos artificiales y actividades de entretenimiento público. Las celebraciones
en otros pueblos y en asentamientos colectivos (kibutz y moshav) en todo Israel
se realizan en menor escala, pero igualmente alegres.
A la mañana siguiente la
festividad está marcada por ceremonias institucionales, como la organización a
cargo del Presidente del Estado, de la recepción al Cuerpo Diplomático y
visitantes distinguidos, y la lectura de un mensaje del Día de la Independencia
que se retransmite a través de la Televisión y la Radio, así como en las redes
sociales e Internet, se entrega el Premio Israel por las contribuciones
destacadas en los ámbitos científico, artístico e intelectual, y se celebra el
Festival de la Canción Israelí, en el que la audiencia selecciona a los
ganadores. Uno de los acontecimientos centrales de la festividad es el Concurso
Mundial de Biblia para la juventud judía, organizado por la Sociedad Bíblica
Judía Mundial y por el cuerpo de instrucción paramilitar Gadná que atrae a
participantes de muchos países y una audiencia presente y televisada.
Para los judíos observantes, Yom Haatzmaut es un signo en el
camino hacia la Redención de Israel y, por lo tanto, requiere una celebración
religiosa. En vísperas del Día de la Independencia se llevan a cabo servicios
religiosos en las sinagogas de Israel con el recitado de los salmos, versículos
de Leja Dodí, y el del maariv diario en el modo de plegaria (nosaj) de yom tov.
Igual que al fin de Yom Kipur, se entona el Shemá, y se hace sonar el shofar en
tekiá y se proclama “El año que viene en Jerusalem Reconstruida. El servicio
concluye con el canto de Shor Hamaalot (Salmos 126). Con la melodía de Hatikva
o Esperanza, Sefirat Ha´Omer, el recitado del doceavo de los 13 Principios de
la Fe y con saludos festivos apropiados.
La observancia en el hogar adopta la forma de una comida
festiva y se cantan zemirot. Se viste el talit y se colocan los tefilin en el
rezo de la mañana o shajarit, que incluyen pasajes que se leen en Shabat y se
recita el Halel en su totalidad, con una bendición introductoria en muchas
sinagogas, luego del cual se lee la haftará (Isaías, 10:32-12:6) que profetiza
los días del Mesías y que sustituye la lectura de la Torá. El servicio continúa
con una plegaria por el bienestar del Estado de Israel y una hazcarat neshamot
por las víctimas de la Shoah y de los defensores caídos de Israel. El rezo de
shajarit finaliza con En Kelohenu, lecturas prescritas y Adón Olam.
En algunas congregaciones de recita Halel en la noche
previa.