Este próximo viernes, 27 de enero de 2016, (29 de Tevet de 5777) se conmemora el Día Europeo de la Memoria del Holocausto o de la Shoah, en virtud de los artículos 2,6,7 y 29 del Tratado de la Unión Europea y del artículo 13 del correspondiente de la Comunidad Europea en los que se da cuerpo al compromiso de los Estados miembros de respetar las normas más elevadas en materia de Derechos Humanos y de no discriminación y de asunción de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
El 27 de enero de 2005, con
motivo del 60 aniversario de la liberación del campo de exterminio de la
Alemania nazi, en Auschwitz-Birkenau, donde se perpetró la matanza de millones
judíos, romaníes, rusos, prisioneros de guerra y homosexuales, entre otros, fue
establecido por la Unión Europea como fecha para el recuerdo y condena del
enorme horror y tragedia de la Shoah u Holocausto. Una fecha elegida también
para hacer frente al aumento del antisemitismo experimentado en Europa,
especialmente, de los incidentes de tal naturaleza y para aprender, una vez
más, la lección más general acerca de los peligros que se derivan de la
persecución de las personas por motivos de raza, etnia, religión, categoría
social, convicciones políticas u orientación sexual.
Los campos de concentración y de exterminio construidos por
los nazis, según se señala en la resolución europea de 2005, figuran entre las
páginas más vergonzosas y dolorosas de la historia en Europa. Los crímenes
perpetrados en Auschwitz deben
permanecer vivos en la memoria de las generaciones futuras como
advertencia contra el genocidio de esta naturaleza que hunde sus raíces en el
desprecio de los demás seres humanos, el odio, el antisemitismo, el racismo y
el totalitarismo.
Lucha contra el antisemitismo y odio racial
La resolución de 26 de enero de 2005 señala que el Holocausto
o Shoah marcó la conciencia europea, especialmente, por el odio criminal hacia
los judíos y la población romaní a causa de su identidad religiosa y racial,
pese a lo cual el antisemitismo y los perjuicios religiosos y raciales siguen
siendo un peligro muy grave para las víctimas y valores europeos e
internacionales de la democracia y de los Derechos Humanos y el Estado de
Derecho y, por consiguiente, para la seguridad general en Europa y el mundo. En
consecuencia, y en relación con lo indicado en el capítulo primero de este
artículo, se insta al Consejo y Comisión, así como a las autoridades locales,
regionales y nacionales de los estados miembros a que coordinen acciones en la
lucha contra el antisemitismo y en la prevención de los atentados dirigidos
contra grupos minoritarios y los principios de la tolerancia y no
discriminación; y promover la integración social, económica y política.
Clima de inseguridad
Los judíos en Europa experimentan una inseguridad mayor
debido al antisemitismo que se difunde por Internet y redes sociales y se
manifiesta en actos de profanación de sinagogas, cementerios y otros lugares de
culto y mediante atentados contra escuelas y centros sociales judíos. También
se manifiesta en agresiones contra judíos en Europa, ocasionando numerosos daños
personales.
Esta conmemoración constituye una ocasión valiosa para
difundir más información sobre la Shoah, mediante la utilización de todos los
recursos disponibles en instituciones como el Museo de Auschwitz-Birkenau y el
Centro Informativo sobre el Holocausto, en Berlín, de tal manera que se
transformen en auténticos recursos documentales y didácticos sobre el
Holocausto. Este recuerdo nos debe acompañar todos los días porque no estamos
ajenos al devenir histórico y porque somos responsables uno de los otros,
aunque no lo queramos reconocer o aceptar.
Aún es preciso un diálogo más profundo y duradero con los
medios de comunicación social sobre la contribución, tanto positiva como
negativa, que su información y comentarios puedan aportar a la percepción y
comprensión de los asuntos religiosos, étnicos y raciales a la presentación de
la verdad histórica. Así mismo, condenar sin paliativos todas las opiniones
revisionistas y la negación del Holocausto por vergonzosas y opuestas a la
realidad histórica.
Recordemos la historia para que no se repita y no la tengamos
que sufrir nosotros o las generaciones venideras.
Fuentes: Archivo del Autor, Comunidad Judía de Tenerife,
Documentación Unión Europea.