martes, 7 de octubre de 2014

Leyes de la sucá

Sucá del Hotel Prima Melajim de Jerusalem.
La construcción de la Sucá debe cumplir los requisitos establecidos por la Torá. El techo de la sucá debe observar tres condiciones para ser válido: estará formado de un material vegetal como ramas de árboles, cañas y matorrales, entre otros; deberá estar desligado de la tierra. Un árbol no puede ser techo de la sucá. Cualquier material que reciba impureza será inválido para cubrir la sucá, como utensilios de madera, baúles y alimentos. Cualquier pared fija y estable será válida para sucá. La sucá deberá medir de altura un metro como mínimo y diez como máximo. El largo y ancho de la sucá deben sobrepasar los 70 centímetros. Se tendrá la precaución de no levantar la sucá bajo un árbol o una terraza.
La primera noche de Sucot debemos cumplir el precepto positivo de comer un cazayit (27 gramos) de pan en la sucá, igual que en la primera noche de Pésaj en la que tomamos la misma cantidad de matzá. En ambos casos se debe ingerir en siete minutos como máximo, mejor si se hace en cuatro minutos. Los demás días no estamos obligados a comer en la sucá. Sin embargo, quien come pan, tortas, pastas y demás alimentos a base de cereales por encima de los 54 gramos lo deberá hacer en la sucá. Aún así quien como todo en la sucá será bendecido.
También se está obligado a dormir en la sucá durante Sucot tanto de noche como en la tarde. No obstante, en lugares donde hace frío en estas fechas o si resulta desagradable, se está exento de dormir en la sucá.
Las mujeres están exentas de esta mitzvá, por ser un precepto positivo ligado al tiempo fijo, pero tendrá recompensa si la cumple.

Fuentes consultadas:

Centro Educativo Sefaradí de Jerusalem, Yaco Newman, Gabriel Siván y Vidal Elgozy.
Fotos: 
Rafael Ben-Abraham Barreto.

La alegría de Sucot

La fiesta de las Cabañas o Jag Sucot se le conoce también como Jag Heasif, la fiesta de la Cosecha, “al fin de año, cuando hayas cosechado el producto de tus labores del campo”. Las mieses de los campos han sido acopiadas y la gente se encuentra ya regocijándose ante el Señor en señal de gratitud por las bendiciones que Él los ha congraciado. Se trata de la última de las tres fiestas de peregrinación o shalosh regalim, que tiene lugar entre el 15 y el 22 de Tishri, en Israel, y un día más en la diáspora. Al igual que Pésaj y Shavuot , Sucot presenta varias denominaciones, que explicamos más adelante.

En los tiempos del Sagrado Templo, el lulav era usado todos los días, sólo en el mismo recinto santo.
Durante esa semana prevalece un ambiente festivo, en la que habitar en la sucá constituye el mandato fundamental. La construcción de la sucá se inicia nada más terminar Yom Kipur, de tal manera que los judíos puedan pasar de un precepto a otro o de una fortitud a otra (majail el jail). Aunque es obligatorio habitar (comer, divertirse e incluso dormir en la sucá), debe constituir un placer y por lo tanto debe tenerse en cuenta la mala salid o las condiciones climáticas adversas. La liturgia incluye el uso d las cuatro especies (lulav, etrog, hadás y aravá cada día) en el servicio de la mañana, salvo en Shabat; se prescriben la lectura del Halel completo y de Kohelet (Eclesiastés) en el Shabat intermedio o de otra manera en Shemini Atzeret (octavo día de la fiesta); la keriat HaTorá establecida y el rezo de musaf o repetición de la Amidá. El cantor, el rabino y el kahal portando las cuatro especies realizan un circuito (hakafá) alrededor de la bimá al mismo tiempo que se recita el poema Hoshana; en el Shabat, se abre el arca sagrada, pero no se extrae ningún Séfer Torá y (ya que llevar el lulav está prohibido) no se efectúa ningún circuito. El séptimo día de Sucot se realizan las siete hakafot (Hoshana Rabá), y ramas de palmeras (aravot) conocidas popularmente hoshanot, unidas en forma de haces, son sacudidas en forma ceremonial. Mover y agitar las cuatro especies en las direcciones estipuladas, de acuerdo a la Halajá, éste, sur, oeste, norte, arriba y abajo, simbolizan el reconocimiento de de D-s como Rey Supremo sobre todos elementos y criaturas del mundo (Tratado de Sucot, 37b). El octavo día de Sucot se observa como una fiesta diferente, Shemini Atzeret que en Israel coincide con Simjat Torá (el noveno día en las comunidades de la diáspora). El primero y el último día (los dos primeros y los dos últimos en la diáspora) se aplican las prohibiciones propias de yom tov, pero se suspenden durante los días intermedios o jol hamoed, fuera del Shabat.Durante el período de la fiesta se intercambian saludos tradicionales. A pesar de que las asociaciones históricas con Sucot son puramente judías y nacionales, el espíritu universalista de la celebración se expresaba también en la ofrenda de los 70 bueyes (Bamidbar,29:12), como súplica de perdón por las 70 naciones del mundo, junto con las plegarias para la paz (Shalom). Esta práctica señalada en el Talmud y en las fuentes rabínicas (Tratado de Sucot, 55b) puede tener cierto fundamento en la visión profética de una época futura en la que todas las naciones se unirán al pueblo de Israel en Jerusalem para festejar Sucot (Zacarías, 14:16).

miércoles, 1 de octubre de 2014

Yom Kipur, la oportunidad para la teshuvá

"En el décimo día de este séptimo mes será el día de las expiaciones, convocación santa os será, y afligiréis vuestras almas, por medio del ayuno. Será para ustedes un Shabat de descanso solemne en el cual afligiréis vuestras almas. A los nueve días del mes por la tarde, de tarde a tarde guardaréis vuestro descanso". (Vayikrá 23:23-32)




La Torá nos marca el 10 de Tishrei como Día del Perdón (Yom Kipur) y de penitencia. Esto tiene su origen en el incidente del Becerro de Oro, de cuando al descender Moshé del monte Sinai, arroja las tablas de la Ley, al ver que el pueblo se había corrompido con la elaboración de dicha escultura. No obstante, este suceso tuvo lugar el 17 de Tamuz (día de ayuno y comienzo de las tres semanas de duelo hasta Tisha B’Av). Moshé Rabenu recibe el 1 de Elul el permiso divino de subir de nuevo al cielo y allí volvió a suplicar indulgencia al Todopoderoso a pesar del pecado cometido. Después de 40 días (que separan el primero de Elul de Yom Kipur) D-s le anuncia a Moshé que su petición ha sido aceptada y perdonados los pecados de Israel. De ahí que en las comunidades sefaradíes se madrugue para el recitado de las selijot durante esos cuarenta días, el mismo tiempo que duró el diluvio universal en los tiempos de Noah.
En las cinco oraciones de Yom Kipur repetimos 26 veces los 13 Atributos de D-s (13 Midot) y constituyen la columna vertebral de las Selijot. El valor numérico del nombre de D-s es 26, atributo que expresa la virtud divina de piedad y benevolencia. Igualmente, son 26 las generaciones que separan a Adam, el primer hombre, de Moshé, la generación que recibió la Torá.

martes, 23 de septiembre de 2014

Raíz y esencia de Rosh Hashaná

El mes de Elul cierra el año hebreo y seguidamente lo asociamos con la Teshuvá (arrepentimiento o retorno). En esta recta final nos esforzamos por inclinar la balanza con la vista puesta en Rosh Hashaná, literalmente, cabeza de año, día en el que todos nuestros actos son examinados. Una balanza que se representa por el signo del Zodiaco de Thisrei. Contamos 12 meses, como lo son las 12 tribus de Israel. Así, pues, la tribu de Dan, raíz hebrea del verbo juzgar, corresponde al mes de Tishrei.
Tres libros se abren en Rosh Hashaná, según detallan nuestros sabios. Los piadosos son inscritos en el Libro de la Vida, los malvados en libros de muerte y los medianos quedan pendientes en la lista de espera hasta Yom Kipur.
Según señala Vidal Elgozy, “para no aterrizar de repente en Rosh Hashaná, sin previo examen de conciencia, tenemos el mes de Elul, durante el cual nos preparamos para el encuentro con el Creador. En este día debemos renovar el contrato de la vida. Los preparativos para algo de tan primordial importancia han de ser minuciosos, pues una pequeña contrariedad puede acarrear graves consecuencias”.

jueves, 18 de septiembre de 2014

Shaná tová uMetuká 5775

Nos unimos al mensaje de año nuevo del Keren Hayesod con nuestros mejores deseos de paz, bendición y progreso para Am Israel, dentro y fuera de sus fronteras. ¡Shaná tová. Feliz año 5775.


Nitzavim-Vayélej

Reflexiones del Rav Yerahmiel.*



Rav.Yerahmiel Barylka.
“Ustedes están hoy en presencia de .A., su D-os: los cabezas de sus tribus, sus ancianos y sus oficiales, todos los hombres de Israel; sus niños, sus mujeres y los extranjeros que habitan en medio de tu campamento, desde el que corta tu leña hasta el que saca tu agua; para entrar en el pacto de .A., tu D-os, y su juramento que .A. tu D-os, concierta hoy contigo, para confirmarte hoy como su pueblo y para que él sea tu D-os, de la manera que te ha dicho y como lo juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob”. (Devarim  29:9-11). 

Nitzavim cuenta con apenas 40 versículos. No hay en su texto ni preceptos de hacer ni prohibiciones. Pero, sí palabras que dijo Moshé antes de su muerte a todo el pueblo de Israel. Esta parashá se lee antes de Rosh Hashaná y por lo general viene acompañada por Vaielej (sólo se leen separados si el primer día de Rosh Hashaná acaece en lunes o martes). Para ello, Moshé reúne a todos los estratos del pueblo, fusionados ante D-os, sin discriminaciones de ningún tipo. Hay aquí tres generaciones, la de los ancianos remanentes aún de la salida de Egipto, la de quienes nacieron en Egipto pero que se criaron en el desierto y los más jóvenes que ingresarán a la Tierra Prometida. Incluso están los extraños que se fueron agregando al pueblo de Israel, primero en funciones de servicio hasta que se integraron totalmente a él. No fue fácil reunir a todos sin excepción, pequeños y grandes, líderes y liderados. Como no es fácil  reunirlos en nuestros días. Hay aquí una acción digna de un pastor, para el cual todas las ovejas son valiosas igualmente. Ese es Moshé, el pastor, que no excluye a nadie, tal como D-os no prescinde de nadie. “Así dice .A. E’lohim: Yo mismo me encargaré de buscar y de cuidar a mi rebaño. Como un pastor que cuida de sus ovejas cuando están dispersas, así me ocuparé de mis ovejas y las rescataré de todos los lugares donde, en un día oscuro y de nubarrones, se hayan dispersado. Yo las sacaré de entre las naciones; las reuniré de los países, y las llevaré a su tierra. Las apacentaré en los montes de Israel, en los remansos y en todos los poblados del país. Las haré pastar en los mejores pastos, y su redil estará en los montes altos de Israel. Allí descansarán en un buen lugar de pastoreo y se alimentarán de los mejores pastos de los montes de Israel.

viernes, 12 de septiembre de 2014

La alegría de las primicias

Lectura de la Torá para Shabat, 18 Elul 5774


Shabat, 13 de septiembre de 2014


Parashat Ki Tavó
Devarim 26:1-29:8
Haftará: Isaías 60:1-22



En esta parashat leemos: “Será que cuando entres al país que el Eterno, tu D-s te da por heredad y lo poseas y mores en él, tomarás las primicias de todo el fruto del suelo, las pondrás en el cesto, e irás al lugar que eligió el Eterno, tu D-s, para hacer morar su nombre allí…” (Devarim 26:12).
Esta porción de la Torá comienza con el vocablo hebreo Vehaiá cuyo significado es “Y será”.
Dicen nuestros sabios que esta expresión indica una situación feliz. ¿Es que existe una alegría mayor que la llegada del pueblo judío a la Tierra Prometida? El rav Yoná Blickstein, escribe en el libro “Jok Lagolá”, entre otras cosas, que “he aquí un segundo momento que complementa la alegría, el hecho de sembrar, arar y cosechar. Luego los hijos de Israel elevan los primeros frutos de su ardua labor como ofrenda de agradecimiento al Todopoderoso en lugar que eligió el Eterno “para hacer morar Su nombre allí”.
Agrega que “la importancia de esta ceremonia se ve subyugada por el hecho de que al traer las primicias al Sagrado Templo de Jerusalem, deberá el agricultor pronunciar los versículos que relatan la historia del pueblo judío”.
“Digo hoy al Eterno, que vine a la Tierra que Él juró a nuestros padres hacernos heredar…Un arameo errante era mi padre. Descendió a Egipto con poca gente. Residió allí y se convirtió en un pueblo grande, fuerte y numeroso…Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos dieron trabajo duro…Entonces clamamos al Eterno, el D-s de nuestros padres. Y el Eterno oyó nuestra voz y vio nuestra aflicción. El Eterno nos sacó de Egipto, con mano poderosa, con brazo extendido, con temor grande, con señales y prodigios. Nos trajo a este lugar y nos dio en este país, tierra que mana leche y miel..Y ahora he aquí que traje las primicias de los frutos de la tierra que me diste”. (Devarim 26:4-10).
El rav Blickstein señala que la alegría del pueblo judío no debe ser superficial. Tiene que estar arraigada en las fuentes ancestrales, en su cultura, en su modo de vida. “No se puede construir un futuro ni vivir un presente judío sin basarse en el pasado apoteósico-añade-del historial hebreo. Debemos, en todo momento,, agradecer los milagros que nos hizo D-s en los momentos difíciles y por la libertad que nos otorgó al salvarnos de la opresión del tirano egipcio”.

Horarios de Shabat para Tenerife Norte

Prendido de velas de Shabat, Viernes, 12 de septiembre de 2014, a las 19:56 horas. Sábado, 13 de septiembre de 2014, Shabat termina a las 20:48 horas.

Shabat Shalom uMevoraj.