miércoles, 8 de junio de 2016

Mucho más que un libro de leyes

En esta edición retomamos la reflexión sobre la fiesta de Shavout o de las Semanas, en la que se conmemora la recepción de la Torá por el pueblo de Israel en el Monte Sinai. La fiesta de Shavuot tiene lugar este año desde la salida de Shabat (11de junio por la noche) hasta una hora después de la puesta del sol del próximo lunes, 13 ), en la diáspora. En Israel se celebra un solo día, es decir, el 12 del presente mes de junio.
Una y solo una vez en la historia de la Humanidad se reveló D-s a un pueblo y anunció su voluntad. El pueblo de Israel recién nacido recibió el mensaje de la Divinidad antes de emprender su trayecto hacia Eretz Israel. Una población de algo más de 600.000 hombres, además de mujeres y niños fueron testigos, en las inmediaciones del monte Sinai del mayor acontecimiento de la historia, el encuentro ante el Todopoderoso y sus criaturas.
El pueblo de Israel recibió los 613 preceptos o mitzvot. De los gentiles, D-s exige 7. Con ello suman 620. El valor numérico del versículo que expresa el reinado eterno del Supremo: D-s reina, reinó y reinará para siempre () es también 620. Este es asimismo el número de los 10 mandamientos. Los nombres de los padres de las 12 tribus suman igualmente 620. Sobre este particular, Vidal Elgozy escribe que “la Torá no es sólo un libro de leyes. Tampoco de historia, no de ciencia, de profecías, pero es todo a la vez, tal que ninguna sabiduría le es ajena”.

viernes, 27 de mayo de 2016

El descanso sabático de la tierra o shemitá

Lectura de la Torá para Shabat  20 de Iyar de 5776

Shabat, 29 de mayo de 2014

Parashat Behar
Vayikrá 25:1-26-2
Haftará: Jeremías 32



25(1) Y le dijo el Eterno a Moisés en el Monte Sinai: (2) “Diles a los hijos de Israel: Cuando lleguéis a la tierra que os di, la tierra descansará por el Eterno. (3) Seis años la sembrarás y seis años podarás tu viña y recogerás su fruto, (4) pero séptimo año será de sábado (shabat, reposo) estricto para la tierra y para  el Eterno: ni sembrarás tu campo ni podarás tu viña. (5) Lo que crezca espontáneamente de tu cosecha (del año anterior), no lo recogerás y no vendimiarás tu viña silvestre. Será año de descanso para la tierra. (6) Y el descanso de la tierra será alimento para ti, para tu siervo, para tu sierva, para tu asalariado y para el forastero que habita contigo. (7) Y también para tus reses y para los demás animales de la tierra, esa producción se destinará a ser su alimento”.
Jerusalem, Eretz Israel./RAFAEL BEN-ABRAHAM BARRETO
(8) “Y contarás siete sábados de años, o sea siete veces siete años, cuarenta y nueve años en total. (9) Y el día diez del séptimo mes del año quincuagésimo, día de la expiación, harás resonar la trompeta en toda vuestra tierra. (10) Santificaréis el año quincuagésimo y proclamaréis en toda la tierra la libertad de todos sus habitantes. Será año de jubileo para vosotros, devolveréis a cada hombre lo que le pertenece y devolveréis cada hombre a su familia. (11) Es jubileo (yovel). Ese año no sembraréis ni cosecharéis lo que haya crecido espontáneamente, ni vendimiaréis vuestras viñas silvestres. (12) Por ser jubileo, ese año será sagrado para vosotros. Del campo comeréis su fruto. (13) Y ese año del jubileo devolveréis a cada cual su posesión. (14) En toda venta o en toda compra que hagáis, a tu prójimo no engañarás…”

martes, 24 de mayo de 2016

Los judíos somos responsables por nuestro prójimo

El 18 de Iyar de 5776 (este año, 26 de Mayo de 2016)  a la fecha de los 33 días del Ómer se le conoce como Lag Baomer. (En hebreo la letra Lamed equivale a treinta y la letra Guímel al número tres). Este trigésimo tercer día es un paréntesis en el periodo denominado Sefirat HaOmer.
Bajo el mandato del emperador romano Adriano (siglo II de la era común) murieron, por causa de una epidemia, 24.000 alumnos de Rabí Akiva. Según narra el Talmud, los alumnos de Rabí Akiva, participaron en la revuelta de Bar Kojvá, última tentativa de los judíos de reconquistar Israel frente a los Romanos (año 132 de la era común). Sus alumnos murieron heroicamente, legando a los pueblos del mundo un ejemplo de valentía en defensa de Eretz Israel. Según nuestros sabios, la epidemia, que había hecho presa de ellos, cesó en Lag BaOmer, y desde entonces dicha fecha se convirtió en un día de gran fiesta. Esta fecha tambien se vincula al recuerdo de Rabí Simón Bar Yojai (siglo II de la era común). Antes de morir (en Lag BaOmer), rogó a sus discípulos que su muerte fuese recordada con festejos.
Una de las principales enseñanzas que nos legó Rabí Shimón Bar Iojai es que los judíos somos individualmente responsables por nuestro prójimo y como ejemplo relató el siguiente caso: “Cierta vez uno de los pasajeros de un barco tomó un pico y comenzó hacer un orificio debajo de su asiento. Los restantes pasajeros comenzaron enseguida a retarlo, a lo que él le respondió: ‘¡Qué les importa a ustedes lo que yo hago debajo de mi asiento!, ¡yo he pagado por él! ¡Tonto! – Respondieron los pasajeros - ¡Tú has pagado por el viaje, pero no tienes derecho a perforar el barco, ni siquiera debajo de tu asiento, porque de lo contrario nos hundiremos todos!’. De la misma manera ocurre con el Pueblo Judío, ya que el comportamiento de cada uno influye sobre los demás”.

viernes, 20 de mayo de 2016

La obligación de ayudar al pobre y al extranjero


En esta edición incluimos el mensaje de Harav Yerahmiel Barylka, de la Sinagoga Rambam de Madrid, acerca de la parashat de esta semana, Emor.
A la finalización del mandato de festejar  Shavuot, que se asocia con la entrega de la Torá, aparece  el mandamiento: "Cuando segareis la mies de vuestra tierra, no segaréis hasta el último rincón de ella, ni espigarás tu siega; para el pobre y para el extranjero la dejarás". ¿Acaso no parece racional, que ayudemos al pobre y al extranjero sin necesidad que la Torá nos lo ordene? A principios del siglo XX el mundo creía que la mente racional llevaría a realizar actos racionales y significativos, tales como la protección de los necesitados. Sin embargo, esa mente creó el terror irracional e inhumano del Holocausto y los genocidios en Ruanda, Bosnia y Darfur. La mente racional permite hacer caso omiso de los necesitados que están justo delante de nuestras narices y de los miles de niños que van a la cama con hambre cada noche en nuestros países.

miércoles, 18 de mayo de 2016

La obligación de aleccionar a los jóvenes en su desarrollo personal y espiritual

Lectura de la Torá  para Shabat, 13 de Iyar de 5776


Shabat, 21 de mayo de 2016

Parashat Emor
Vayikrá 21-24
Haftará: Ezequiel 44:15-31

“Y dijo el Eterno a Moisés: -Habla a los kohanim, hijos de Aharón, y les dirás a ellos que a un alma no se impurificará en su estirpe-”. En estos términos, comienza el pasaje de la Torá de esta semana -sobre lo que Rashí nos acota-:”Diles - y les dirás –nos marca la obligación de los mayores en aleccionar y alentar a los más jóvenes”.
En esta porción, se abordan, entre otros asuntos, la figura y la función del sacerdocio desde tiempos inmemoriales, muy relevante en el Pueblo de Israel. Ya desde antes de que se instituyera este título y fuera conferido a los hijos de Aharón, el cometido lo cumplían, primero los primogénitos de las familias y luego de que éstos decepcionaron, se transfirió a los levitas, quienes siempre fueron considerados como los líderes espirituales del Pueblo de Israel. Sin embargo, la calidad máxima de santidad, D-s se la otorgó a Aharón y a sus hijos como un privilegio de responsabilidad eterna. Así pues, en esta porción se detallan los privilegios, condiciones y obligaciones del Kohen o de los kohanim.
La parashat Emor alude a las festividades de D-s, siendo la primera de ellas, el Shabat. El Shabat, lejos de ser un encierro y restricciones, constituye una fiesta para el hombre, para la mujer, para los niños y toda la familia.

viernes, 13 de mayo de 2016

El impacto de la pérdida de seres queridos

Lectura de la Torá para Shabat, 6 de Iyar de 5776

Shabat, 14 de mayo de 2016
Parashat Kedoshim
Vayikrá 16.20
Haftará: Ezequiel 20.2-20 (Sef)
Amós 9:7-15 (Ash)

“Y habló el Eterno a Moisés después de la muerte de los hijos de Aarón, cuando se acercaron frente al Todopoderoso y murieron)".
Como es sabido, fue tras la inauguración del Mishkán o Santuario del Desierto, que dos de los hijos de Aarón, Nadav y Abihu, fueron consumidos por el fuego divino, al ofrecer un incienso en el Sancta Sanctorum sin permiso previo. El profesor Mario Suli se pregunta acerca de este suceso justo en un día tan señalado para el Pueblo de Israel, en gente de tan relevante categoría como eran los descendientes directos de Aarón el Sumo Sacerdote o Kohen Gadol, y primordialmente en quienes no habían pecado en su vida, dado que eran muy jóvenes. Se pregunta qué tan grave falta fueron a enmendar y por qué Aarón, su padre, debió sufrir la pérdida física de sus dos hijos.
Tal como señala el Zohar Hakadosh en la parashat Vaiakhel: “No se consagra el Mishkán del desierto hasta que fue inaugurado junto con el Tabernáculo Celestial”. Es decir, que en el ámbito celestial y en las dimensiones que operan más allá de las coordenadas del timpo/espacio también se instauraba un  Santuario. Fue necesario entonces para el mismo, Kohanim de la más pura estirpe. Y, ¿quién mejor que estos dos jóvenes hijos de Aarón con la pureza de su propia juventud? Al respecto, Mario Suli escribe: “Por lo mismo son elevados a través de un fuego Serefat Neshamá vehaguf kulam, siendo así que Aarón su padre recibe la infausta con aceptación, sabedor de que se trasladaron a un mundo superior para tan sagrada misión. De ahí lo que relata el Pasuk “Vaidom Aarón” y  calló Aarón, es decir, asumió lo profundo del suceso que no fue más que un medio para tan sublime finalidad”.

viernes, 6 de mayo de 2016

Las leyes de decoro y pureza familiar


Lectura de la Torá para Shabat, 29 Nisan 5776

Shabat, 7 de mayo de 2016
Ajare-Mot
Vayikrá 16:1-18:30
Hafará: Ezequiel, 22

16 (1) Y el Eterno le dijo a Moisés después de la muerte de los dos hijos de Aarón, los cuales habían muerto al acercarse al Eterno: (2) “Dile a Aarón, tu hermano que no entre en cualquier momento al santuario, detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el Arca para que no muera, por cuanto Yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio…”.
Esta parashat precede, por regla general a la celebración de Pesaj, aunque en esta ocasión, se se da lectura una semana después en la Golá, debido a que este año es embolismal. En Israel tiene lugar la lectura de Kedoshim. En la porción que nos ocupa se especifican prohibiciones como la de ingerir la sangre de todo animal, dado de que la vida de la carne reside en la sangre, o hacer aquellas cosas que se hacían en la tierra de Egipto. Advierte sobre las normas de decoro y de pureza, poniendo el acento sobre la prohibición de descubrir la desnudez de los padres, hermanos o tíos, o de los familiares más cercanos, y sobre las relaciones sexuales ilícitas o abominables. La claridad de sus mandatos en esta materia es taxativa.
Más información sobre la parashat en www.aish.com y www.jabad.org.