Tishá ve Av equivale literalmente al noveno día del mes de
Av, día de ayuno del quinto mes (Zacarías 7:5, 8:19), que se observa como
taanit tzibur, uno de los ayunos públicos. Tishá ve Av es el día más triste del
calendario hebreo, y sirve como punto culminante de las tres semanas de duelo
que comienzan el 17 de Tamuz (ayuno de Shavá Asar Betanuz) y que recuerda la
destrucción del primero y segundo templos. El Bait Rishón, el Primer Templo,
que fue destruido por los babilonios bajo el mandato de Nabucodonosor, el 9 de
Av, en el año 586 antes de la Era Común; y el Bait Sheiní, Segundo Templo, que
fue incendiado por los romanos, bajo las órdenes de Tito, en la misma fecha del
año 70 de la Era Común. El ayuno se observa desde la puesta del sol hasta una
hora después de la puesta del sol del día siguiente, junto con las
restricciones aplicables al duelo familiar, que incluye la prohibición de
afeitarse o calzar zapatos de cuero, mantener relaciones maritales y no se
intercambian saludos.
Después del servicio vespertino (maariv) en la sinagoga,
en la víspera, se retira la cortina (parojet) del arca sagrada, se apagan o
disminuyen las luces, en tanto que los asistentes se sientan en el suelo o en bancos
bajos y siguen con la Lectura de Eijá (Libro de las Lamentaciones) y elegías a
la luz de las velas y cerillas. Las lamentaciones constituyen el testimonio
visual de Jeremías del primer Jorbán. En el servicio matutino de la mañana
siguiente no se viste talet ni colocan tefilin los varones, dado que son
ornamentos inapropiados para un día de duelo nacional; las bendiciones que
aluden a la prohibición de tefilin y calzado ese día no se pronuncian hasta el
mediodía. Tres personas son convocadas para la lectura de la Torá (Devarim
4:25-40), que se recita en tono bajo, en tanto que se canta la Haftará
(Jeremías 8:13-9:23) con la melodía de Eijá, a excepción de los dos versículos
finales. El rezo de shajarit concluye con una nueva selección de Kinot y Alenu
y el Kadish para duelo. En el rezo de minja se viste talet y se colocan los
tefilin con las bendiciones correspondientes y se pueden ocupar los asientos
habituales.
Tisha ve Av se ha asociado, desde la caída del Segundo
Templo, con muchas experiencias de persecuciones y tragedias den la diáspora
(Galut). Las desgracias ocurridas en esa fecha comprenden la captura de la
última fortaleza de Bar Cojbá, Beitar (135 EC) , por parte de los romanos; el
establecimiento de un santuario pagano en el lugar del Templo (136 EC); la
expulsión de los judíos de Inglaterra (1290) y de España (1492); las matanzas
de judíos durante las Cruzadas y el Holocausto nazi (Shoá).