Su Majestad el Rey de España, Felipe VI, presidirá el martes, 27 de enero de 2015, el acto institucional de la conmemoración del Día Europeo de la Memoria de la Shoah, en Madrid, ante las principales autoridades y representaciones del Estado y de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), entre otras instituciones públicas y privadas. Con tal motivo, el presidente de la Comunidad Judía de Tenerife, Ronny Abecassis, ha viajado a la capital del país para estar presente en los actos previstos.
Con motivo del 70 aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz-Birkeanu por parte de los ejércitos aliados, reproducimos un artículo de nuestro editor sobre el X aniversario de la institución del Día Europeo de la Memoria del Holocausto o Shoah. El 27 de enero de 2015
se conmemora el Día Europeo de la Memoria del Holocausto o de la Shoah, en
virtud de los artículos 2,6,7 y 29 del Tratado de la Unión Europea y del
artículo 13 del correspondiente de la Comunidad Europea en los que se da cuerpo
al compromiso de los Estados miembros de respetar las normas más elevadas en
materia de Derechos Humanos y de no discriminación y de asunción de la Carta de
los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
Cuando se cumplen diez años de la institución de tal conmemoración,
por ejemplo, aún el Parlamento de Canarias no se ha pronunciado, al respecto,
al menos que se sepa, ya sea mediante una declaración institucional, ya sea
mediante la organización o promoción de una actividad orientada a atender el
requerimiento de la Unión Europea para que en todo su territorio se recuerde
cada 27 de enero a las víctimas del Holocausto; en similares circunstancias,
salvo error u omisión mía, podrían estar los Cabildos y ayuntamientos, aunque
con la excepción de la Corporación del Puerto de la Cruz que sí aprobó una
moción para honrar la memoria de las víctimas del Holocausto.
El 27 de enero de 2005, con motivo del 60 aniversario de la
liberación del campo de exterminio de la Alemania nazi, en Auschwitz-Birkenau,
donde se perpetró la matanza de millones judíos, romaníes, rusos, prisioneros
de guerra y homosexuales, entre otros, fue establecido por la Unión Europea
como fecha para el recuerdo y condena del enorme horror y tragedia de la Shoah
u Holocausto. Una fecha elegida también para hacer frente al aumento del
antisemitismo experimentado en Europa, especialmente, de los incidentes de tal
naturaleza y para aprender, una vez más, la lección más general acerca de los
peligros que se derivan de la persecución de las personas por motivos de raza,
etnia, religión, categoría social, convicciones políticas u orientación sexual.
Los campos de concentración y de exterminio construidos por
los nazis, según se señala en la resolución europea de 2005, figuran entre las
páginas más vergonzosas y dolorosas de la historia en Europa. Los crímenes
perpetrados en Auschwitz deben
permanecer vivos en la memoria de las generaciones futuras como
advertencia contra el genocidio de esta naturaleza que hunde sus raíces en el
desprecio de los demás seres humanos, el odio, el antisemitismo, el racismo y
el totalitarismo.
La resolución de 26 de enero de 2005 señala que el Holocausto
o Shoah marcó la conciencia europea, especialmente, por el odio criminal hacia
los judíos y la población romaní a causa de su identidad religiosa y racial,
pese a lo cual el antisemitismo y los perjuicios religiosos y raciales siguen
siendo un peligro muy grave para las víctimas y valores europeos e
internacionales de la democracia y de los Derechos Humanos y el Estado de
Derecho y, por consiguiente, para la seguridad general en Europa y el mundo. En
consecuencia, y en relación con lo indicado en el capítulo primero de este
artículo, se insta al Consejo y Comisión, así como a las autoridades locales,
regionales y nacionales de los estados miembros a que coordinen acciones en la
lucha contra el antisemitismo y en la prevención de los atentados dirigidos
contra grupos minoritarios y los principios de la tolerancia y no
discriminación; y promover la integración social, económica y política.
Los judíos en Europa experimentan una inseguridad mayor
debido al antisemitismo que se difunde por Internet y redes sociales y se
manifiesta en actos de profanación de sinagogas, cementerios y otros lugares de
culto y mediante atentados contra escuelas y centros sociales judíos. También
se manifiesta en agresiones contra judíos en Europa, ocasionando numerosos
daños personales. Esa presión la notamos, aunque solapadamente, en las Islas, cada
vez que surge algún tipo de tensión en Oriente Medio, que afecte a Israel.
Desgraciadamente, las simpatías por la comunidad árabe o palestina residente en
las Islas es bastante notoria.
Esta conmemoración constituye una ocasión valiosa para
difundir más información sobre la Shoah, mediante la utilización de todos los
recursos disponibles en instituciones como el Museo de Auschwitz-Birkenau y el
Centro Informativo sobre el Holocausto, en Berlín, de tal manera que se
transformen en auténticos recursos documentales y didácticos sobre el
Holocausto. Este recuerdo nos debe acompañar todos los días porque no estamos
ajenos al devenir histórico y porque somos responsables uno de los otros,
aunque no lo queramos reconocer o aceptar.
Aún es preciso un diálogo más profundo y duradero con los
medios de comunicación social sobre la contribución, tanto positiva como
negativa, que su información y comentarios puedan aportar a la percepción y
comprensión de los asuntos religiosos, étnicos y raciales a la presentación de
la verdad histórica. Así mismo, condenar sin paliativos todas las opiniones
revisionistas y la negación del Holocausto por vergonzosas y opuestas a la
realidad histórica.
Recordemos la historia para que no se repita y no la tengamos
que sufrir nosotros o las generaciones venideras.