viernes, 16 de octubre de 2015

Todos con Israel en Madrid

El próximo domingo tendrá lugar una concentración de apoyo al Estado de Israel en Madrid y de repulsa hacia la oleada de atentados y ataques terroristas que están ocurriendo en el país, y como expresión de rechazo a la expansión del antisemitismo.  Que quede patente nuestra solidaridad y respaldo a nuestros paisanos de Eretz Israel. 

La torre de Babel

Harav Yerahmiel Barylka*



Todos los grandes protagonistas de la historia han intentado que hablemos una sola lengua y obedezcamos una sola voz. Pero, al igual que cada tribu de nuestros antepasados cruzó el Mar Rojo por caminos distintos, entre muros deaguas y unos se veían a otros, nosotros sabemos que la verdadera belleza vital está en la variedad.
Sólo D's es Uno, los seres humanos, tenemos la distinción por nuestra propia naturaleza.
Desde Sargón (como arquetipo) pasando por Alejandro Magno, los emperadores romanos, Napoleón, y de algún modo los grandes imperios actuales, todos los "grandes de la tierra" intentaron eliminar las minorías asimilándolas.
Intentaron volver a la Fiesta de Babel: "Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras" (Bereshit 11: 1). Pero, .A. con su propia mano los confundió y confunde una y otra vez, logrando que "ninguno entienda el habla de su compañero".
El intento de establecer un imperio global no tendrá éxito en imponer su autoridad sobre toda la tierra pese a que "nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer" (Ib. 11:6). Solamente siendo "uno mismo" se logra  la verdadera supervivencia.

Análisis de la parashat Noaj

Harav Yerahmiel Barylka.

Reflexiones de Harav Yerahmiel Barylka*


El Zohar explica que Noaj tenía miedo de que si oraba por su generación, él mismo no estaría a salvo. ¿Cómo podemos entender esto? Para ello tenemos que hallar la naturaleza de la tefilá. Para implorar por alguien, tienes que entenderlo; te tienes que identificar con sus luchas, sus miedos, su historia, su persona. Noaj tenía miedo que su oración le acercaría a su generación y tal vez se vería influenciado por su mala conducta. Por el contrario, Abraham entendió a la gente de Sedom, dándose cuenta de lo que hacían. Pero no tuvo ambages de orar por ellos.
Curiosamente, el Zohar relata que Noaj al salir del arca, inspeccionó la destrucción a su alrededor, llorando: “Dios, ¿es ésta tu misericordia?” Dios entonces reprendió a Noaj: “Durante 120 años [el tiempo que se tardó en construir el arca] esperé por sus oraciones...”
Este Zohar acentúa la tragedia de Noaj que tenía el potencial para salvar a su generación, ya que era uno de ellos. Sin embargo, en lugar de ser pro-activo, simplemente renunció a ampararlos. El Talmud (Sanedrín 108a) describe el origen de su maldad: “se convirtieron en vanidosos y pretenciosos como resultado de la bondad que Dios les otorgó”. “Su alta calidad de vida, les hizo rechazar a Dios”, “Dicen, pues, a Dios: apártate de nosotros, Porque no queremos el conocimiento de tus caminos. ¿Quién es el Todopoderoso, para que le sirvamos? ¿Y de qué nos aprovechará que oremos a él? (Job 21: 14-15)”.
El midrash, además, comenta sobre el estilo de vida de su generación. Su tecnología fue avanzada hasta tal punto, que el midrash relata, que rara vez tenían que trabajar.

La experiencia y sabiduría de Noaj

Lectura de la Torá para Shabat, 4 de Marjeshvan de 5776

17 de octubre de 2015
Parashat Noaj Bereshit:6-9-11:32Haftará Isaías 66:1-24


La indigencia azotaba a la humanidad y la miseria hacía estragos entre los hombres antes del nacimiento de Noaj. En aquella época la mortandad infantil era muy elevada, pocos lograban sobrevivir. Noaj modificó radicalmente el panorama con su ciencia y sabiduría: la humanidad comenzó a proliferar, a explotar los recursos naturales y la riqueza se acumulaba en manos de unos pocos en detrimento de la mayoría, dando lugar a la división de la sociedad entre ricos y pobres, entre señores y plebeyos.

Los señores eran los amos indiscutibles; la plebe, o sea los hijos del hombre-ya que los primeros se creían descendientes de dioses-carecían de todo derecho. Ellos junto con sus mujeres pasaron a ser propiedad de los señores, tal como escribe el Rab. Shelomó Yabra.
“La excesiva abundancia-agrega-y riqueza acumulada en un sector minoritario, exento de valores éticos y morales, degeneró en el vicio y la corrupción que luego también se extendió a las clases inferiores, dando como resultado la situación descrita con tanto realismo en la Torá”.

viernes, 9 de octubre de 2015

Parashat Bereshit

Harav Yerahmiel Barylka.

Reflexiones del Rav Yerahmiel Barylka*


La primera parashá de Sefer Bereshit se ocupa de los eventos cosmopolíticos de la Creación; las primeras generaciones de la humanidad; la jerarquía de la Naturaleza (“y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra ...”); las relaciones entre el hombre y Dios (el Jardín del Edén, la recompensa y el castigo); el matrimonio (“no es bueno que el hombre esté solo”); la muerte (“hasta que vuelvas a la tierra”); la Divina Providencia (“la voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra”); y la esperanza de vida dado a hombre (“serán sus días ciento veinte años”). 

Las lecciones extraídas de las historias relatadas aquí están los fundamentos de la forma en que Dios guía el mundo. Parashat Noaj que leeremos la próxima semana, también se ocupa de un evento cósmico cuyo impacto se siente más allá del reino de la humanidad y que remodela las relaciones entre Dios, el hombre y la naturaleza. Los acontecimientos de las parashiot de Bereshit y Noaj y cubren cientos de años e influyen en todo el curso del mundo.

jueves, 8 de octubre de 2015

En el principio

La Ley de Moshe o Torá constituye el compendio de los primeros cinco libros de la Biblia: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio, que traducido al hebreo equivalen a Bereshit, Shemot, Vayikrá, Bamidbar y Devarim. Su autoría se atribuye a Moshé Rabenu, que los escribió bajo inspiración Divina. Es decir, la Torá es obra de D-s, que fue dada al pueblo de Israel, por medio de Moshé Rabenu, en el Monte Sinai, hace algo más de 3.300 años. Desde entonces mantiene su vigencia hasta hoy y hasta el fin de los tiempos.

Parashat Bereshit, capítulo I.
La creencia sostiene que la Torá que poseemos hoy es la misma que nos transmitió Moshé Rabenu, la que nos fue dada por D-s en el Monte Sinai. El Jumash contiene la historia de la Humanidad, el origen del pueblo hebreo y toda su legislación civil y religiosa y finaliza con la muerte de Moshe. Los ocho versículos finales de la Torá que tratan de la desaparición de Moshe y su sepultura fueron redactados por Josue. (Devarim, 34:5); el Talmud (B.B. 14) le atribuye a Josue la escritura del citado relato.
La Torá contiene 5.845 versículos.

domingo, 4 de octubre de 2015

Mensaje de Harav Yerahmiel Barylka sobre Simjat Torá

Llegamos  a ser una nación únicamente con la entrega de la Torá en el desierto, en tierra de nadie, por lo que nuestra identidad judía provienen únicamente de la Torá.

Sólo entonces .A. nos llevó a la Tierra de Israel, espacio esencial para la práctica de las mitzvot, tal como lo prometiera a Abraham, Itzjak y Iaacov.
Cuando Abraham recibió  la instrucción de Lej Lejá, "ir a la tierra", hace casi 4000 años establecimos una conexión con nuestra tierra mayor que la de cualquier otro pueblo a la suya.
La lectura de la Torá finaliza sin que se vea cumplido el sueño prometido.
La terminación repentina de la narrativa al final del Pentateuco lo convierte de ser un libro que describe la creación de la nación israelita en una que describe la creación del vínculo entre el cielo y la tierra. Este hecho se conecta al primer versículo de la Torá, que representa los orígenes de la brecha entre el cielo y la tierra, a su pasado, lo que vamos a leer en Simjat Torá, y que anuncia que todavía existe esta brecha. En Simjat Torá, estos dos extremos se encuentran. Ahora nos toca a nosotros cerrarla. 

Harav Yerahmiel Barylka. Sinagoga Rambam de Madrid.